miércoles, enero 10, 2007

En la Argentina por los niños no nacidos

Es mucha la tristeza que nos causa como Cristianos comprometidos el tema del Aborto. Tristeza por esos pequeños Angelitos que el Señor ha amado desde toda la eternidad y por los que ha dado la vida en la Cruz. A ellos también los podríamos considerar mártires. Pues son los últimos e este mundo. Tristeza porque ellos mueren en la oscuridad de un hospital, una clínica clandestina o no, en manos de médicos, enfermeras o parteras que deberían ser los que los recibieran en este mundo. Tristeza porque nadie nunca se enterará de sus nombres, ni de sus talentos, ni de sus aciertos o de sus errores. Tristeza porque no tendrán nunca la oportunidad de decir su verdad. Tristeza por sus propios padres, que llevados por la desesperación o el egoísmo intentan tapar con tierra lo que el Cielo grita a voces. Y ahora también tristeza por los cientos o miles de niños que nunca llegarán a ver la luz del sol y que mueren en los experimentos científicos tras la clonación.

Por ellos. Por todos esos pequeños hermanitos que no tienen voz. Por ellos que se tienen que ir cuando aún no han terminado de llegar. Por ellos es que vamos a rezar. Y por sus padres. Y por los que "ayudaron" a sus padres. Y queremos proponerlo de aquí hasta el fin de nuestras vidas y hasta el fin del mundo. Tomaremos este compromiso: Que diariamente incluiremos en nuestras intenciones de oración a los Angelitos No Nacidos del mundo y a quienes no les permitieron nacer. Por los pequeñitos, para que el Señor los reciba en su seno y les de la felicidad que les ha sido negada. Y por los que han cometido este espantoso acto, para que se arrepientan y vuelvan al Señor, y no promuevan nunca más el aborto. Al contrario, conviertan su corazón y se vuelvan por su testimonio en fervientes defensores de la vida. La oración o jaculatoria que incluiremos será esta:

Querido Niño Jesús.

Te pedimos por todos los niños no nacidos de este mundo, y por todos los que no nacerán por causa del egoísmo. Bautízalos por los méritos de tu Sangre preciosa derramada en la Cruz y llévalos al Cielo.

Ilumina el corazón de todos los que promueven el aborto para que entiendan que solo Dios es el dueño de nuestras vidas. Te lo pedimos junto con María tu Madre, y Madre de toda la humanidad.

Amén


Invitamos a todos los hermanos del mundo a unirse a esta Campaña Universal y Eterna. Si decides plegarte a esta causa, envíanos un mail con tu nombre expresando el compromiso, pues vamos a publicar los nombres de los que se comprometan. Si no deseas que se publique el nombre completo, envíanos los primeros nombres y tu país de residencia.